-Qué? te dejé ciega?
-No. Cuando era chica tenía estas jaquecas, y fui al doctor y me dijo que necesitaba anteojos. Y yo no entendia, no tenía sentido porque veía bien. Entonces, me dieron los anteojos, me los puse y en el auto volviendo a casa, derrepente grité. Por que los circulos grandes y verdes que ví toda mi vida no eran circulos, eran hojas...en los arboles. Podía ver hojas. Y nisiquiera sabía que me estaba perdiendo las hojas. Nisiquiera sabía que las hojas existían. Y derrepente...hojas!, you are glasses.
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